Bajo Sospecha, por Pablo

No estoy seguro si el director Stephen Hopkins hizo sus pininos dirigiendo videos musicales o comerciales de televisión. Su técnica parece afirmar esto, y sus primeras películas (como "Predator 2" y "Nightmare on Elm Street 5"), aunque no eran propiamente originales ni muy buenas, al menos mostraban un diestro estilo narrativo y visual, con la misma floritura técnica que años después seguirían usando directores como Michael Bay y Guy Ritchie. Es por eso que me parece muy extraña la decisión de asignarle a Hopkins una película lenta y cerebral, con un mínimo de locaciones y nula acción.Tal vez el director quería probar sus dotes para enfrentar cualquier proyecto, aunque no estuviera en línea con sus cintas previas; tal vez el estudio quiso agregar cierta dinámica a lo que era una historia casi estática... finalmente el resultado es un desperdicio de talento, frente y detrás de las cámaras. Particularmente doloroso es el desperdicio de dos magníficas actuaciones de dos de los mejores actores contemporáneos.

Pero vayamos por partes. "Bajo Sospecha", basada en el guión de una película basada en la novela "Brainwash" de John Wainwright (¿cómo?) recuenta el interrogatorio que el policía Victor Benezet (Morgan Freeman) efectúa sobre el millonario empresario Henry Hearst (Gene Hackman). Benezet sospecha que Hearst es culpable de dos violaciones/homicidios en los que las víctimas fueron niñas de doce y trece años. Durante el inmisericorde interrogatorio van surgiendo posibles motivos que no ayudan al empresario, incluyendo sus problemas maritales y su aparente fascinación por las mujeres jóvenes.

Y así se desarrolla la película. La guerra de intelectos (y de actuación) podría haber sido fascinante, descubriendo capa por capa las motivaciones y conflictos ocultos de ambos personajes. Pero en manos de un director que obviamente no sabe qué hacer con el material, el inherente dramatismo se convierte en parodia, al mismo tiempo que las emociones humanas se ven reemplazadas por torpes técnicas visuales que arruinan toda posibilidad de compenetrarse con los personajes.

Me parece que la falla principal de la película es el modo en el que el director Hopkins trata de acentuar el drama de ciertas revelaciones o situaciones mediante el uso desmedido de todas los trucos disponibles en el programa de edición Avid. Resplandores, variación de velocidad, estruendoso uso de la pista musical y un curioso (y fallido) truco para continuar la interacción de los actores aún en escenas tipo "flashback", donde la presencia de ambos es absurda e innecesaria. Esta historia no necesita de adornos para ser interesante. Me imagino lo que un director como Francis Coppola o Curtis Hanson hubieran hecho con ese guión. Estos dos directores (entre otros) no le tienen miedo a la narrativa pausada, y muestran la confianza necesaria en sus actores para encargarles el ritmo y tono... Hopkins, por su parte, tiene pavor de que la cinta empieze a aburrir, por lo que se siente obligado a introducir sus trucos y malabares donde puede. Desafortunadamente ese es exactamente el enfoque equivocado para este tipo de película.

Y lo peor es que las fantásticas actuaciones de Morgan Freeman y Gene Hackman pudieron elevar esta cinta hasta los cielos, si el director lo hubiera permitido. Los actores secundarios son también buenos, aunque Monica Belucci tiene tantos problemas con el idioma que las escenas en las que habla son poco satisfactorias. Como contraste, las escenas en las que tiene que reaccionar mudamente, sólo con su cara y lenguaje corporal, muestran gran talento. La voz es tal vez la herramienta principal del actor, y cuando se tiene que preocupar más por pronunciar correctamente un idioma extraño que por imprimir emoción a los diálogos, es comprensible que la actuación sufra un poco. Aún así, buen inicio de esta guapa actriz en el mercado americano.

"Bajo Sospecha" es una oportunidad desperdiciada, aún más lamentable por el talento de sus actores; también es una triste muestra del estado actual de Hollywood, que se siente obligado a homogeneizar todo el producto que de ahí sale, con la esperanza de captar la mayor audiencia posible a costa de la integridad de las películas. Mala actitud que resultará en peores películas. Sólo puedo recomendar esta película por las actuaciones, pero con la advertencia de que están profundamente corrompidas por el estilo de Hopkins.

Calificación: 5

Pablo

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Bajo Sospecha (Under Suspicion)

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