SLC Punk!, por Pablo

Luego del gran éxito artístico y económico de "Trainspotting", varios cineastas han intentado recapturar la intensidad y estilo narrativo de esa cinta en películas de mayor o menor éxito; entre las buenas puedo mencionar "Leaving Las Vegas", "Lock, Stock & Two Smoking Barrels" y "Go" (aunque éstas dos últimas ciertamente le deben mucho a "Pulp Fiction"). Sin embargo, todas tratan de imitar el factor "cool" y el estilo visual estilizado. Pocas (o ninguna) aspiran al contenido intelectual que elevaba a "Trainspotting" sobre otras cintas de tema similar.

Es hasta ahora cuando "SLC Punk!" se perfila como la versión norteamericana del mencionado clásico europeo, adoptando el mismo tono nihilista pero a la vez analítico y realista.

"SLC Punk!" es un vistazo a la vida de dos punks residentes de Salt Lake City, en el estado norteamericano de Utah. Esta es una de las ciudades más conservadoras de los Estados Unidos, con un ambiente fuertemente religioso en virtud de su población predominantemente mormona. Sin embargo "SLC Punk!" no busca burlarse de las creencias religiosas de otros; por el contrario, bajo la máscara del humor contrasta las conductas de los diferentes grupos sociales, usando como base la "pureza" de la auténtica doctrina anarquista de la filosofía punk. Para su crédito, el brutal análisis arroja respuestas (o al menos cuestionamientos) que no favorecen a ningún estilo de vida en particular. El protagonista encuentra fallas y deshonestidad en todos las corrientes de pensamiento, incluyendo la suya. La clásica batalla de ideología contra economía tiene una brillante exposición, al igual que los factores que inspiran a la rebelión.

Pero cuidado... este análisis está presente, pero rodeado de escenas de excesos, comedia desinhibida y suficiente actitud como para ocultar la auténtica intención de la película. Quien decida quedarse en ese primer nivel, oyendo música punk clásica y emocionándose con las batallas entre punks, mods, new waves, rockers y demás subestratos, perfecto. Se divertirá mucho. Pero el auténtico valor de esta cinta radica en el comentario analítico y la brutal honestidad sobre el estilo de vida occidental (para estas fechas más bien mundial).

El protagonista y narrador es Matthew Lillard, cuyas previas actuaciones en "Scream" y "Wing Commander" han sido, en el mejor de los casos, tolerables. La total posesión de su personaje en "SLC Punk!" me hace dudar si realmente está actuando o no. Es un papel con el que es difícil congraciarse; de ninguna manera es el "héroe" de la película. Pero de algún modo el desempeño del actor lo eleva a un nivel totalmente humano, por lo que es difícil no identificarse con los aspectos del personaje que todos compartimos.

Summer Phoenix tiene un corto pero maravilloso papel, que se encarga de voltear el análisis hacia el protagonista, y aunque los resultados no son del todo sorpresivos, servirán para iluminarnos sobre algunos puntos importantes de la convivencia social que casi siempre pasamos por alto.

Y como nota especial para fanáticos de Star Trek, Jennifer Lien, la desaparecida "Kes" de Star Trek: Voyager tiene una participación donde está irreconocible. Sólo me di cuenta de que era ella por la voz.

Más que un examen de la cultura punk, esta película contiene un diestro análisis de la condición humana en la sociedad moderna. Quien se anime a ver más allá del pelo azul y el grafitti de "Anarquía", será gratamente recompensado.

Calificación: 9

Pablo

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