"De los creadores de Big Daddy"...
Si esa frase no mete miedo incluso al más obtuso cinéfilo (yo), nada lo hará. Bueno, tal vez "De los creadores de Supernova". Afortunadamente "Tan Perversa Como el Diablo" no cae en los abismos de mediocridad de "Big Daddy". Y la única razón es que "Tan Perversa Como el Diablo" tiene un excelente elenco de comediantes poseedores de los más precisos instintos humorísticos. Es sólo su tremendo talento lo que hace que esta película no sea un ejercicio en masoquismo para el espectador.
La trama narra los esfuerzos de dos "slackers", Wayne (Steve Zahn) y J.D. (Jack Black) por evitar que Darren Silverman (Jason Biggs), su mejor amigo, se case con Judith (Amanda Peet), una de las más castrantes y odiosas mujeres que he visto en la pantalla. Dichos esfuerzos incluyen el fingir que Darren engaña a Judith, tratar de enamorarlo con una amiga de la secundaria y como último recurso, secuestrar a Judith y fingir su muerte. Y eso es tan sólo en la primera media hora de la película. Después las cosas sólo se complican más con la inclusión de un entrenador asesino y un grupo de malhabladas monjas.
La mayor parte del humor es terriblemente plano, y es doloroso ver a estos comediantes usar todo su talento para tratar de inyectarle vida a los inertes diálogos. Amanda Peet mantiene diestramente a su personaje entre la credibilidad y la caricaturización; Jack Black y Steve Zahn, quienes tanto han contribuido en películas como "High Fidelity" y "Suburbia", muestran una química extraordinaria y sus personalidades en ocasiones trascienden el cansado guión para producir las pocas risas que se encuentran en la película. Jason Biggs como Silverman no es tan exitoso, pero por otro lado no esperaba demasiado de él. Es agradable, pero no está a la altura de sus co-protagonistas.
Tal vez la falla principal de la película reside en que el equipo de producción no pudo conciliar la inocente trama con la aparente intención de convertir a "Tan Perversa Como el Diablo" en una cinta vulgar y ofensiva, a la par (¡ya quisiera!) de "Loco por Mary" o "Me, Myself and I". Nunca se atreve a acercarse siquiera al extremo, pero tampoco quiere ser demasiado blanca. El resultado es tedioso y predecible, y aunque definitivamente hay ciertos momentos buenos, hubiera sido mucho mejor si los cineastas hubieran tenido el valor de llevarla a lo excesivo. En cierto modo esta película me recordó "Dude, Where's My Car?"; ambas tienen una buena premisa y sólidos comediantes, pero carecen de consistente humor. Lo que rescata a "Dude..." es la excelsa estupidez en que se regodea, cosa que la lleva a trascender sus limitaciones. Si los productores de "Tan Perversa Como el Diablo" se hubieran atrevido a llevarla a esos extremos, con el beneficio de su gran elenco, hubiera resultado tal vez una joya de la comedia escatológica a la altura de "BASEketball" o "Mallrats".
Por un lado, "Tan Perversa Como el Diablo" es tediosa, predecible y no muy
graciosa. Por otro, es un placer ver el ensamble de Zahn, Black y Peet, aunque
se vean severamente limitados por el deficiente guión. Sólo la recomendaría
a fanáticos de los mencionados actores y a futuros esposos como posible advertencia
contra ese tipo de mujeres, que ciertamente son reales y están allá afuera...
acechando. Pero quien quiera ver una buena comedia, mejor rente alguna de
los Hermanos Farrelly o la mencionada "BASEketball".
Calificación: 5
Imagen © 2001 Columbia Pictures
Columbia Pictures
2001
93 minutos
Dirigida por Dennis Dugan
Escrita por Hank Nelken y Greg DePaul
Editada por Patrick J. Don Vito y Debra Neil-Fisher
Elenco:
Steve Zahn .... Wayne Furnberger
Jack Black .... J.D. McNugent
Jason Biggs .... Darren Silverman
Amanda Peet .... Judith Fessbeggler
Amanda Detmer .... Sandy Perkus
R. Lee Ermey .... Entrenador Norton
Neil Diamond .... Como él mismo