Por coincidencia tuve oportunidad de ver "Princess Mononoke" el mismo día que ví "Las Locuras del Emperador", de Disney. Aunque en ocasiones pretendo ser objetivo (dije "pretendo ser", no "soy"), el contraste entre ambos estilos es tan evidente que produce tristeza ver los casi ilimitados recursos de Disney desperdiciados en mero producto en serie, hecho con más atención en la cartera que en el corazón.
"Princess Mononoke" es una obra más del decano de la animación japonesa, Hayao Miyazaki. Virtualmente todos los animadores trabajando en cine (incluyendo los cuasi-esclavos de Disney) veneran al Sr. Miyazaki por su increíble talento, visión y perseverancia en la exaltación de la animación dibujada. Sus obras previas "Mi Vecino Totoro" y "El Servicio de Entregas de Kiki" son mundialmente aclamadas como máximas exponentes del arte animado, y por increíble que parezca, "Princess Mononoke" las supera en todos los aspectos.
La película es una fábula que une los conceptos básicos de los cuentos de hadas con las clásicas características de la mitología oriental. Al principio de la cinta un espíritu jabalí transformado en demonio ataca la comunidad del príncipe Ashitaka, y lo infecta con una maldición que podría matarlo. Ashitaka entonces emprende un viaje en el que busca una cura para su mal y la razón por la que el generalmente benévolo espíritu jabalí sufrió tal corrupción. Su búsqueda lo lleva a participar en una lucha entre la dama Eboshi, quien propone el uso de metales para incrementar el poderío de la humanidad, y los dioses animales del bosque, que sufren por el implacable avance de la humanidad en su territorio.
A primera vista suena como una trillada historia de moraleja ecológica, pero es mucho, mucho más que eso. El cuidado puesto en el desarrollo de los personajes (tanto a nivel visual como narrativo) es tremendo. Miyazaki tiene el valor de presentar caracteres cien por ciento humanos. Nadie es totalmente bueno ni totalmente malo. Sólo son personas (y animales) en circunstancias extraordinarias, respondiendo de la mejor manera a las cambiantes condiciones de un mundo en el que la tecnología está paulatinamente suplantando a la espiritualidad como el modo de vida prevalente.
Aunque siempre hablo en contra de los doblajes, la versión norteamericana de "Princess Mononoke" hace uso de actores reales para prestar voz a los personajes; Billy Crudup (el guitarrista en "Casi Famosos") como Ashitaka, Claire Danes (Julieta en "Romeo + Julieta") como la princesa Mononoke, Billy Bob Thornton (escritor y actor de "A Simple Plan") como el taimado Jigo y Gillian Anderson (la querida Scully en "X-Files") como Moro, el dios lobo, experimentan franca empatía por sus personajes, imprimiendo mucha personalidad y convirtiéndolos en seres humanos, repletos de los sutiles detalles que marcan la diferencia entre un personaje escrito y una persona viviente. Otro gran logro fué reclutar al genial escritor Neil Gaiman (autor del comic Sandman, entre otras cosas) para adaptar el guión original, labor que realizó con tal atención al detalle que hasta cuidó el número de sílabas en los diálogos para que coincideran con los movimientos labiales de los dibujos.
Y es eso mismo, la atención al detalle tanto visual como narrativo, lo que
eleva a esta cinta de ser una mera caricatura, llevándola a trascender el
género, una frase muy usada, pero en este caso totalmente cierta. "Princess
Mononoke" no es sólo una extraordinaria película animada. Es sencillamente
una extraordinaria película. Muy recomendada, especialmente para detractores
de la animación... si esto no los convence, nada lo hará.
Calificación: 10
Imagen © 1999 Miramax Films
Miramax Films
1997 (versión original), 1999 (versión norteamericana)
133 minutos
Dirigida por by Hayao Miyazaki
Escrita por Hayao Miyazaki Guión en inglés y adaptación por Neil Gaiman
Elenco (voces en inglés):
Billy Crudup .... Ashitaka
Claire Danes .... San, Princesa Mononoke
Minnie Driver .... Lady Eboshi
Gillian Anderson .... Moro
Billy Bob Thornton .... Jigo
Keith David .... Okkoto
John Di Maggio .... Gonza
Tress MacNeille .... Fundidora
Jada Pinkett .... Toki