Alzen la mano los que vieron "Crueles Intenciones". Dejen la mano alzada los que piensan que fué una película tan buena que merece una secuela. Síganla alzando los que quieran ver la secuela aunque no salga ninguno de los actores que salió en la original. Mmh. Veo pocas manos.
"Crueles Intenciones", hace dos años, fué una nueva filmación de la famosa obra francesa "Relaciones Peligrosas" adaptada al mundillo de una escuela para jóvenes ricachones en Nueva York. La trama, bien sabida, sigue a una manipulativa mujer que busca la ruina social de sus rivales, para lo que enlista la ayuda de su inmoral primo. Aunque no fue la gran cosa, "Crueles Intenciones" resultó entretenida, sobre todo por el marcado contraste entre la imagen usual de los jóvenes actores (como Sarah Michelle Gellar, Ryan Phillipe y Selma Blair) y sus papeles en la cinta. E indudablemente, lo que hundió esta película fue un final totalmente improvisado, que evidentemente tenía como única intención la de moralizar.
De algún modo la cinta tuvo cierto éxito, lo que le garantizó una secuela de muy bajo presupuesto, desde luego, en la que aparecen algunos de los mismos personajes que en la primera, pero ninguno de los actores que la hicieron interesante. Y curiosamente, el resultado no es tan intolerable como uno supondría.
Lo que quiero decir con esto es que definitivamente es una mala película, pero al menos tiene el valor de no resolver fácilmente las cosas y de apegarse a la amoralidad que abraza durante el desarrollo de la historia. En ella, el joven Sebastian Valmont llega a vivir a casa de la nueva esposa de su padre. Éste es evidentemente un vivales, que sólo se casó porque su nueva esposa es tremendamente rica. Así, Sebastian se hace hermanastro de Kathryn, una atractiva muchacha que bajo su máscara de hija modelo esconde a una auténtica arpía que no ve con buenos ojos la llegada del hermano postizo. En la escuela, Sebastian se enamora, obviamente, de la hija del director, una virginal y sencilla joven que resiente el ambiente de lujo que la rodea. Cuando Kathryn se entera de esto, hace hasta lo imposible por hacer que el romance fracase, y para ello se lleva por delante a quien se le interponga.
Esto es melodrama de la peor clase, y como tal, entretiene bastante. Las actuaciones son pésimas, los diálogos risibles por malos y el estilo visual inexistente. Pero, como dije, al menos quiero dar crédito a esta cinta por no comprometer su amoralidad al entregar un final cínico y frío, pero totalmente satisfactorio.
"Crueles Intenciones 2" podrá entretener a quienes gustaron de la primera
parte y quieran más de lo mismo, pero con actores desconocidos. Para el resto
de la gente, sólo puedo advertir que esta película es como una telenovela
con todos sus enredos y "sorpresas" condensados en hora y media de entretenida
basura. Si se está en el humor correcto puede resultar divertida, a pesar
de (o por razón de) sus evidentes deficiencias. Con la difusión suficiente,
no me extrañaría que se convirtiera en cinta de culto.
Calificación: 5
Imagen © 2000 20th Century Fox
Twentieth Century Fox
2000
90 minutos
Dirigida y escrita por Roger Kumble
Elenco:
Amy Adams .... Kathryn Merteuil
Robin Dunne .... Sebastian Valmont
Sarah Thompson .... Danielle Sherman
Keri Lynn Pratt .... Cherie Crayman
Deanna Wright .... Penny Cartwright
Mimi Rogers .... Tiffany Merteuil-Valmont