Es una lástima que la tendencia de las últimas películas
de James Bond sea tan comercial e insulsa como se ha venido presentando, cuando
podría formar parte de la narrativa de uno de los géneros cinematográficos
más interesantes, desde el punto de vista del entretenimiento fílmico
sin grandes pretensiones.
Esta última entrega de las aventuras del agente 007, "El Mundo
No Basta" (The World Is Not Enough, 1999), se nos presenta prácticamente
como una repetición de las dos anteriores cintas, lo cual no es necesariamente
malo desde el punto de vista comercial, aunque va en detrimento total del
desarrollo de la serie. Bueno, no puedo decir que no disfruto las escenas
de acción, las explosiones, los comentarios graciosos de Bond insertados
con precisión quirúrgica, o (ahem) a las chicas Bond. Pero con
cada iteración la experiencia se vuelve menos emocionante y prácticamente
no hay expectativa, un elemento que a mi gusto es determinante para considerar
como buena una cinta.
En esta ocasión la trama se desarrolla alrededor de la tarea que Bond
(Brosnan) asume cuando el magnate petrolero King es asesinado por un descuido
del mismo Bond (primer punto interesante: el agente 007 no es perfecto). Esta
tarea consiste en cuidar los pasos de la hija del magnate, Elektra King (Sophie
Marceau), ya que hay motivos para pensar que un grupo terrorista interesado
en manipular el mercado petrolero intentará matar a la nueva jefa del
consejo de administración de las industrias King.
A partir de esta premisa, se desarrollarán las consabidas escenas de
persecuciones y de aparatos altamente sofisticados, que en algún momento,
pensé tomarían alguna dirección interesante al estilo
de (toda proporción guardada) "Mentiras Verdaderas" (True
Lies). Sin embargo esto último no sucedió, únicamente
el conocido desfile de escenas submarinas, persecuciones automovilísticas
y uno que otro golpe de Karate. ¿Que puede decirse en su favor? Bueno,
como algunos dicen, las cosas buenas no tienen por qué cambiar. Pierce
Brosnan encarna perfectamente al personaje, dándole esa mezcla justa
de seriedad y comicidad. Judi Dench como "M" es una sólida
aportación al universo Bond. El villano, encarnado por Robert Carlyle
(si, el bonachón de "Full Monty") no es puramente diabólico,
sino que es un enfermo mental con un motivo y con recursos bastante limitados
en contraste a los magnates patológicamente malvados de las cintas
anteriores. Además, los que vayan a ver esta cinta encontrarán
casi al final en el destino de los malos, una de las escenas más políticamente
incorrectas del cine actual (segundo punto interesante: el agente 007 tiene
sangre en las venas como todos nosotros).
Para los fans de las películas de Bond, esta es una cinta que los dejará
satisfechos aunque no extasiados, y el público en general solo encontrará
agradable la sonrisa de Brosnan o los atractivos de Sophie Marceau y Denise
Richards, en poco más de dos horas plagadas de acción
al estilo Bond.
Calificación: 7
José Luis
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1999
127 Minutos. Clasificación B.
Dirigida por Michael Apted
Escrita por Neal Purvis y Robert Wade
Elenco:
Pierce Brosnan .... Commander James Bond, Agent 007
Sophie Marceau .... Elektra King
Robert Carlyle .... Renard
Denise Richards .... Dr. Christmas Jones
Robbie Coltrane .... Valentin Dmitrovich Zukovsky
Judi Dench .... M
Desmond Llewelyn .... Q
John Cleese .... R